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Entrevistas y columnas

Beau Smith: “¡Oye! Estoy buscando cómics. ¿tienes algun?”

por Beau Smith

Hablé con un amigo el otro día que ha estado leyendo cómics durante solo un par de años. No creció leyendo o recolectando cómics como yo. Siempre supo que estaban cerca, y que algunos de sus amigos más cercanos los leyeron, pero nunca se unió al pasatiempo.

Le pregunté por qué, ahora y no entonces, y él realmente no tenía una respuesta. No sabía por qué. Entonces le pregunté cómo ahora. (No hay bromas de vaca marrón).

Me dijo que hace un par de años estaba en una venta de biblioteca local comprando libros. Tenían un trato en el que por $ 2.00 le darían un saco de plástico y podría llenarlo con tan numerosos libros como pudiera empujarlo. ¿Cómo podría dejar pasar ese trato?

Dijo que recogió los estantes y obtuvo los libros que realmente estaba interesado y una pareja en la que podría estar interesado, pero que todavía le quedaba algo de espacio en la bolsa. Miró y miró y simplemente no pudo encontrar más libros de historia o ficción que estaban en su reino de interés. Luego, mientras clasificaba una pila más grande, se encontró con algunos cómics recientes que se marcaron 10 centavos cada uno. Le preguntó a la amable biblioteca si estos contaban como libros para la venta. Ella asintió con la cabeza que sí y fingió que podía escucharlo.

Pudo llenar su bolsa con la pila de cómics que tenían. Pensó que se los daría a su sobrino o a otros niños de la familia. Esos cómics nunca llegaron a manos juveniles.

Más tarde ese fin de semana, mi amigo tuvo tiempo de pasar por su recorrido de la biblioteca. Sacó los cómics y por cualquier razón, en ese momento, sus primeras y coloridas portadas lo agarraron. Él eligió mejor que les daría una oportunidad y leería una pareja. Esa pareja se convirtió en toda la pila. Esa noche leyó las aventuras de los X-Men, Spider-Man, Batman, Transformers, 100 balas, escaladas y varias otras características de cuatro colores llenos de diversión.

La década de 1960

Se deleitó en la forma en que los libros eran infantiles, pero maduros; Tabón de telenovela y, sin embargo, lleno de fantasía de combate de puños. Podía ver por qué tan numerosos de sus amigos (incluidos yo) habían sido lectores durante numerosos años. Estos cómics eran como los programas de televisión y las películas en las que amaba y se deleitaba tanto. Me admitió que podía patear el trasero por no unirse a nuestra comunidad de lectura de cómics antes. Intentó saltar mi caso de que no tensé lo suficiente lo buenos que eran los cómics. No le dije que no me di cuenta porque había estado en su caso durante años. Era la única persona a la culpa y lo sabía.

No hace falta decir que le di una pila de cómics que había escrito. Como un concesionario de drogas, le dije que esta pila era libre, después de esto, tendría que comprar el suyo. Pude ver que iba a ser un nuevo adicto al cómic. Lo tenía enganchado.

La década de 1940

Mientras hablábamos durante el almuerzo, me dijo que estaba disfrutando de su nuevo objetivo para su lectura y colección de cómics. Ahora está haciendo su objetivo comprar 10 cómics de cada década. Si bien tiene las últimas cuatro décadas ya cubiertas, dijo que lo encuentra un poco caro mientras continúa su búsqueda en los años sesenta, década de 1950, 1940 e incluso 1930. De acuerdo, no está buscando condiciones de menta o cómics muy populares; Él solo está buscando los impresos en esas décadas.

Pude ver mi propia pasión de la infancia en sus ojos y voz mientras me contaba sobre “la emoción de la caza”. Se amplió todo cuando me habló de perder algunos problemas en eBay cuando fue superado, pero para encontrar los problemas la próxima semana cuando descubrió algunos de los problemas en una convención local. Fue genial ver esa pasión que tenía a través de los ojos de otra persona. Estaba muy contento con él. Prácticamente me fui a casa esa noche y desenterré algunos viejos problemas que tuve de esas décadas para darle, pero eso lo engañaría de la caza y lo que hace que algunos cómics sean tan especiales como nuevas décadas. Claro, si se atasca, lo ayudaré, pero creo que realmente atesorará esos cómics en su lista si sabe que los encontró por su cuenta.

La década de 1950

Hay un par de razones por las que te cuento esta historia. Si eres como yo y has estado leyendo cómics para siempre, quiero que esta historia reavive tu pasión para buscar algunos cómics no leídos que siempre has querido leer. Si eres semi nuevo con los cómics, entonces tal vez, como mi amigo, te inspirarás para establecer algunos objetivos de lectura y descubrir un mundo completamente nuevo de entretenimiento. En la recolección, tener subcolecciones siempre es una maravilla. Invento otros nuevos para mí todo el tiempo. No hay nada como una nueva caza para que los jugos de cómics funcionen.

Póngase su sombrero de caza Elmer Fudd y sal y busque un cómic con un “wabbit wascally”. Existe su primera subcolección para comenzar. No digas que no te di nada.

Buena caza,

Beau Smith

El rancho de puño volador

www.flyingfistranch.com